Para nutrir verdaderamente el alma, deberemos aplicar el principio de “dejar salir antes de entrar”.
Lo que precisa el alma realmente, más que nutrientes, es que se aparten
los anti-nutrientes que constantemente emiten los cuerpos mental y
físico en tanta cantidad y variedad. Dichos anti-nutrientes son las emociones descontroladas, los apegos
materiales y personales, las posesiones y el sentido de la posesión, la
incontrolada gestión de los sentidos…
El alma en sí misma es el nutriente por excelencia.
Lo único que necesita es expresarse libremente sin condicionantes. La
energía vital de la que está compuesta, es pura nutrición para el cuerpo
y la mente. Si dejas que esa energía fluya constantemente, nada más
necesitarás, y el cuerpo y la mente facilitarán ese gozoso encuentro.
Los
principios nutritivos básicos para el alma empiezan, primero, con el
trato respetuoso a su actual envase físico, que es el cuerpo, a fin de que el alma pueda experimentar. Después con el
control férreo del cuerpo mental, el cual pretende sin desfallecer regir
por su cuenta el camino experimentativo, sin tener en cuenta tu
realidad verdadera.
Por tanto, liberar
al cuerpo físico de tóxicos, venenos y alimentos densos, nutriéndolo
con los alimentos más afines al diseño de su constitución y nutrir la
mente con los pensamientos purificados procedentes de un cuerpo físico
desintoxicado, serán los pilares que te ayudarán enormemente a nutrir tu
alma, permitiéndote a ti tomar las riendas de tus vivencias y
experimentaciones materiales sin sufrimiento y lleno de felicidad
verdadera.
¿El equilibrio nutre el alma?
El equilibrio es la
mejor opción y entre estos dos aspectos, entre ser positivo o ser
negativo, también hay un equilibrio y es ser realista.
Ser
realista es valorar las dos opciones lo
negativo y lo positivo, Cuando
emprendas el camino desde el realismo fruto del análisis y la reflexión
de ambas polaridades, estarás plenamente
preparado para tomar la mejor opción del momento. Trabajar desde ese
equilibrio es lo que te permitirá que aflore la sabiduría desde la cual
todo se resuelve en su forma y tiempo más adecuados a tu momento.
Lo
que eres en positivo, ya lo eres y forma parte de tu realidad, pero lo
que eres en negativo, es la contraparte que te sirve precisamente para
experimentar y valorar lo que realmente eres. Eso es ser realista,
evitar aferrarte a una de las dos posiciones y comprender que todo forma
parte de tu camino de experimentación, necesitas tanto una como la otra
en su justa medida a cada momento. Ahí
reside el equilibrio para sentirte verdaderamente feliz.
¿Dónde buscar los nutrientes?
Solemos buscar tan lejos que dejamos de ver lo que tenemos
cerca de nosotros. Dentro de
nosotros mismos está todo lo que se precisa para ello. Pero, por
defecto, el ser humano tiene la tendencia a buscar lo más lejos posible:
en las galaxias, los extraterrestres, los intraterrenos, el pasado, el
posible futuro, otras civilizaciones… Creemos que así encontraremos algo
mucho más maravilloso que lo que existe en lo cercano. El Universo siempre te pone aquello que necesitas al alcance de la mano,
en el aquí y ahora, allí donde Él mismo te ha situado; así es de
sencillo. Observa y encontrarás lo que precisas ya sea para tu momento, para una
situación concreta y para tu evolución experimental.
Todo
lo lejano puede servirte para iniciar tu andadura y tu despertar, y
aportar el conocimiento previo de lo que realmente eres y cómo funciona
la vida. Puede servirte para situarte y activar el proceso de toma de
conciencia de tu realidad, pero quedándote anclado en lo externo, en lo
lejano y siguiendo a los demás por siempre, poco o nada solucionará tus
inquietudes o pesares, si no que es muy posible que te quedes atrapado
en la ilusión y esa ilusión frenará tu evolución.
Lo
más cercano que posees es escuchar y atender el clamor que mana de tu
interior. ¿A quién vas a escuchar? A la voz de tu interior que mana de la intuición
expresada en sentimiento puro y que te propone lo que más te conviene, a
pesar de que en un instante determinado puede ser que tu comprensión
sea incapaz de entender.
Mi Consulta Psicólogica
Ana Luisa López Pérez
Psicóloga
Av. del Puerto Nº 81, Planta 6ª, Pta. 44.
Valencia, España. 46021.
Tel. 963 22 59 73
Móvil: 600 25 80 77
miconsultapsicologica@hotmail.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario