Si te dijeran: pide lo que quieras,
que se te concederá cabalmente. ¿qué pedirías? ¿Te sientes merecedor de recibir eso que pensaste?
Todo el mundo quiere algo. Siempre tenemos deseos, sueños, metas. Pero algunas realmente nos ayudan a crecer como persona, a avanzar en nuestro camino; mientras que otras nos mantienen en la inercia de lo que estemos viviendo y no nos llenan realmente.
Algunas personas van de meta en meta sin pensar si es eso lo que realmente quieren. Se empeñan en algo para quedar bien ante los demás, complacer a la familia, o por inercia, por miedos, etc. y cuando logran su objetivo quedan casi tan vacías como antes, porque no era algo que realmente querían en su ser más profundo.
Todo el mundo quiere algo. Siempre tenemos deseos, sueños, metas. Pero algunas realmente nos ayudan a crecer como persona, a avanzar en nuestro camino; mientras que otras nos mantienen en la inercia de lo que estemos viviendo y no nos llenan realmente.
Algunas personas van de meta en meta sin pensar si es eso lo que realmente quieren. Se empeñan en algo para quedar bien ante los demás, complacer a la familia, o por inercia, por miedos, etc. y cuando logran su objetivo quedan casi tan vacías como antes, porque no era algo que realmente querían en su ser más profundo.
Entonces, cuando nos hacemos preguntas y tratamos de ser lo más sinceros
posible con nosotros mismos, podemos encontrar respuestas, intuición.
Cuando la persona está muy preocupada o confundida no se le hace fácil
saber lo que realmente quiere, o saber si debe actuar por lo que quiere o
lo que le conviene en ese momento. En estos casos, además de hacerse
preguntas, puede servir el concentrarse en el sentir, en el sentir lo
que te dice el cuerpo, el corazón... la intuición.
La intuición es uno de nuestros recursos internos; nos puede ayudar a
saber lo que realmente nos sirve al alma. La intuición es esa vocecita
que te dice "por aquí es la cosa". La intuición también es sentir que
una señal tiene sentido para ti, y esa señal puede ser algo que alguien
dijo en la radio, o algo que viste "casualmente" que parecía que era
contigo. Tal vez tengas tu intuición más activa de lo que te has dado
cuenta. Practica para que la "oigas" cada vez más en tu vida.
Conocerte mejor, cuando te planteas una meta y empiezas a practicar la intuición, a
observar tus miedos, creencias, limitaciones, la tendencia al
abatimiento, al pesimismo, o a echarle la culpa a los demás, a
justificarte para seguir en lo mismo, etc. etc. o cuando empiezas a ver
tus fuerzas, tu flexibilidad para cambiar de rumbo si es necesario, tu
creatividad... te conoces más y vas creciendo en el camino. Entonces, es
una meta que te hace crecer, y cuando la logras tiene más satisfacción,
llegas a ella repotenciado.
Acción: lo primero es decidir qué quieres, lo segundo disponerte para lograrlo.
Sueña: Haz una lista de lo que quieres, libremente; con toda la
imaginación y el entusiasmo de tu niño interior, date permisos para
soñar.
Luego, revisa la lista desde tu Yo Adulto, sopesando opciones, recursos, riesgos, oportunidades, y luego establece prioridades.
Después, revisa si es ético, si tu Padre interno, ese sabio que es
ético, te dice que es bueno para ti, para el planeta, para la vida.
Entonces, decide y decide las acciones.
Déjate guiar, toma una acción
para cada día, cada semana, en pro de tu objetivo. Usa tu poder de
materialización, tu poder mental de visualización. Sueña despierto cada
noche, en especial antes de dormir, para que la imagen pase a la mente
subconsciente, la emoción en tu cuerpo.
Materializar esos deseos del alma que nos van marcando el camino de
tu verdadero desarrollo y avanzar en el cumplimiento de tu misión y
visión de vida.
Mi Consulta Psicológica
Ana Luisa López Pérez
Psicóloga
Av. del Puerto Nº 81, Planta 6ª, Pta. 44.
Valencia, España. 46021.
Tel. 963 22 59 73
Móvil: 600 25 80 77
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